En su gestión como gobernador de Aguascalientes, Carlos Lozano de la Torre le otorgó contratos al abogado de toda su confianza, Juan Ramón Collado Mocelo, identificado también como incondial del ex Presidente Carlos Salinas de Gortari y destacado en el mundo de la farándula por su matrimonio con Yadhira Carrillo y su divorcio de Leticia Calderón.

Se le señala como el que armó los llamados libros blancos de NISSAN, es decir, se comisionó de pulir y blindar todas las dudosas compras y ventas en terrenos y obras.

Pero también, fue responsable de ayudar a tapar el boquete financiero en el Instituto de Educación de Aguascalientes en el año 2014, luego de que Francisco Chávez Perdiera la eleccion a la alcaldía de la capital.

Es precisamente este asunto, que ha despertado mayores sospechas y que están ameritando la revisión de los contratos que habría sostenido.

Los acuerdos que pactó el gobierno de Lozano de la Torre a través de Paco Chávez con Juan Ramón Collado, quedaron etiquetados como “reservados y confidenciales”, en apego a una ley de transparencia a modo.

Aún y cuando el Instituto de Educación cuenta con un departamento jurídico, se contrató al despacho de Collado, con domicilio en la Ciudad de México para dar asesoría legal; el concepto era conseguir la adecuada implementación de la Reforma Educativa en Aguascalientes.

Tan sólo en el año 2014, de junio a diciembre, recibía cada mes un millón de pesos como pago de sus honorarios.

Casualmente, en ese mismo año, Carlos Lozano de la Torre pidió el auxilio a la Secretaría de Hacienda para que le entregaran al estado casi 700 millones de pesos, aparentemente para implementar con éxito la Reforma Educativa, aunque también se estableció que eran para tapar el cuantioso déficit financiero que ya tenía el Instituto de Educción.

La administración lozanista justificaba sin embargo, que ese dinero evitaría poner en riesgo la estabilidad de Aguascalientes y la supuesta tranquilidad del magisterio.

El caso cobra auge hoy,  a raíz de la comparecencia del ex titular del Instituto de Educación ante la justicia local por una deuda a un corporativo de abogados que contrató para la demanda de la presunta compra de computadoras por cerca de 400 millones de pesos, pero que nunca se entregaron.

A los litigantes no se les pagó el total por sus servicios que cotizaron en 6 millones de pesos y heredaron la deuda, según recordó el actual director Raúl Silva Perezchica. “Hubo una contratación de un despacho externo a lo que viene siendo el aparato jurídico que tiene el Instituto de Educación de Aguascalientes, en los cuales nosotros hicimos la investigación y no hay evidencias de trabajo”.

Ahora, el corporativo de Juan Ramón Collado se encuentra en la mira. “Todo esta parte se está investigando. A partir de esto que está pasando ahorita, pues investigar ya las irregularidades posibles que haya habido”, concluyó Silva Perezchica.