Aguascalientes
INFRENABLE TRÁFICO DE INFLUENCIAS EN PLANTELES DEL CECYTEA Y CONALEP
Engañosa operación del SNTE deja indefensos a los maestros: Laura Ramírez
Al reclamar la transformación del sistema educativo, la dirigente en Aguascalientes del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación de México, Laura Ramírez Pérez, denunció un excesivo tráfico de influencias para la ocupación de plazas en los planteles que pertenecen al Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado (CECyTEA), y al Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (CONALEP).
En entrevista con La Contra [Portada], señaló que este tipo de prácticas tienen remitente: “al menos en el caso de los CECyTEAS, yo no responsabilizaría tanto al director Salvador Martínez Macías, sino un funcionario de apellido Zamarripa, que es precisamente de los que manejan ahí”.
Indicó que ya hay casos, donde el personal se inconforma sobre el tráfico de plazas, como ha sido el plantel Ferrocarriles, que alzó la voz para cuestionar el comportamiento de algunos directivos. “Indiscutiblemente, hay tráfico de influencias, es algo muy típico de la gente que pertenece al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE)”, agregó.
Del mismo modo, Laura Ramírez advirtió que los trabajadores que pertenecen a ambos modelos educativos, los están dejando a la indefensión, puesto que no pagan cuotas al SNTE, y por tanto, no son reconocidos como sus afiliados.
No conocen sobre cómo quedó su homologación, de cuánto les correspondía por re categorizarse, entre otras prestaciones. Señaló que se trata de manejos turbios que están atentando en particular, contra la estabilidad laboral de los docentes.
“Eso de que ellos pertenezcan al SNTE es una ilusión. Si realmente pertenecieran, desde la primer quincena les estuvieran cobrando las cuotas sindicales; sobre todo se especifica en los estatutos del SNTE que pertenecen a él quienes aporten su cuota sindical. Lo que están haciendo es sólo dividirlos y ni si quiera les han cumplido en la parte que les prometieron”, agregó.
Es por ello, que sin consideración alguna, se afectan los derechos laborales de los trabajadores y les reducen las horas clase a algunos maestros sólo para aprovechar esos recursos para integrar en nómina a más personas. “Yo tengo el caso de una maestra que tenía 30 horas cuando laboraba en el plantel J. Guadalupe Peralta Gámez. Luego la cambiaron a Jesús María, con sólo 20 horas y de manera fragmentada, por lo que estaba a punto de renunciar”.
Ante tales situaciones, y la débil intervención del Instituto de Educación del Estado, no dudó que al menos en los planteles del CONALEP puedan tomar fuerza las inconformidades y se decidan a hacer algo. En el caso de las unidades del CECyTEA, dudó que puedan emprender una acción en común, al considerar que el personal “tiene miedo de perder lo poco o nada con que cuenta”.