Aguascalientes
BAJO CAPAS DE PINTURA, ESTABA EL COLOR ORIGINAL DEL CRISTO DEL SANTO ENTIERRO
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) intervino durante 5 años en la rehabilitación de la escultura denominada Santo Entierro, representativa en las actividades religiosas de la Semana Santa y la cual se exhibe del lado izquierdo de la Catedral de Aguascalientes.
Se trata de un Cristo del Siglo XVIII que es apreciado como arte sacro. Fue minuciosamente atendido por afectaciones en su pintura debido a la humedad.
Christian Medina López Velarde, subdirector del Centro INAH Aguascalientes, comentó que la imagen tenía además cuatro capas de repintes realizadas en el pasado por personal no capacitado.
“El proceso que llevó el Santo Entierro fue primero una limpieza general, segundo quitar las diferentes capas de pintura que tenía, porque tenía repintes del Siglo XIX, del Siglo XX, de modo que se le quitaron los diferentes tintes que tenía… cuatro retintes y una vez que se llegó al nivel de la pintura original, en el siguiente proceso fue fijar bien esa pintura, sobre todo algunas partes que estaban ya muy sueltas, craqueladas, se le llama, y finalmente la reintegración con pintura actual pero hecha con la técnica antigua en aquellas partes donde se había perdido la pintura”.
La imagen del Santo Entierro tiene la característica de que es movible. Sus brazos suben y bajan, así como el cuello, a fin de tener un mejor efecto al colgarse en la cruz. Además, cumple con apariencia inerte cuando se le rinde culto el Viernes Santo.
Christian Medina comentó que en los últimos 9 años se han hecho restauraciones de varias imágenes importantes, entre las que se encuentran 9 cristos de San José de Gracia del Siglo XVIII que tienen familias en sus casas y que participan en la procesión del Jueves Santo. También el Señor del Salitre, patrono de Calvillo, el cristo de San Juan Nepomuceno en el centro de Aguascalientes y el Señor de las Angustias, patrono de Rincón de Romos.
“Creemos por parte del Instituto, que las imágenes de más culto que pertenecen a cristos en la Diócesis están en buenas condiciones, dígase el Señor del Encino, el Señor de la Capilla que se encuentra en Jalisco y en general, lo que hay de parte del INAH es una supervisión y una muy buena coordinación con la Diócesis, sobre todo con la Comisión de Arte Sacro, para estar el pendiente, darles seguimiento a todos estos cristos para en su momento, poderles dar la restauración adecuada”, concluyó.