El debate que defiende la vida desde el momento de la concepción cumple 25 años y posiblemente sumará más tiempo, al menos  en Aguascalientes, debido a que la iniciativa propuesta por legisladores de los partidos Encuentro Social, Acción Nacional y Movimiento Ciudadano para esa intención, quedó a un solo voto de distancia para que fuera reformada la Constitución Política local.

El acalorado debate que se dio en el Congreso del Estado y que al mismo tiempo evidenció las intolerancias e inexperiencias, fue sonorizado por las protestas y hasta ofensas  de grupos que se pronunciaban a favor y en contra del aborto. Detrás de algunos de ellos se señalaron a  personajes relacionados con partidos como fueron del PAN, el PRI, el PRD  y MORENA.

Diputados panistas aseguraban que no se buscó criminalizar a la mujer que aborta sino salvar a las dos vidas, al de la madre como del hijo que lleva en el vientre. También se pretendía la prohibición a la pena de muerte y la muerte asistida.

MORENA proponía que el tema se tratara en un parlamento abierto. Eder Guzmán Espejel acusaba que la Constitución Política no reconoce al embrión como persona. Calificó a la propuesta de ser un error jurídico legislativo, un disparate jurídico, una aberración legislativa y una improvisación.

“MORENA no hace demagogia asustando a la gente ni llevando agua a su molino, manipulando sentimientos nobles de la gente sólo para posicionarle en las primeras preferencias electorales”, puntualizó.

El diputado del Partido Verde, Sergio Augusto López lo contradijo y mencionó  que el tema es una lucha entre dos absolutos: la libertad y la vida y por tanto él se pronunció a favor de la vida.

Otro morenista,  Cuauhtémoc Cardona Campos, admitió que Aguascalientes no escapa a la epidemia de embarazos de adolescentes y consideró que no es posible interrumpir de manera absoluta la gestación cuando así se desee o se requiera, aunque dejó en claro que “no podemos tampoco autorizar la práctica indiscriminada de abortos bajo la idea del derecho de la mujer a disponer de su cuerpo”.

El perredista Jorge Saucedo estimó que este es el siglo de los derechos de las mujeres y más tarde que temprano conquistarán esas garantías que reclaman.

Pidió sacar de la clandestinidad la interrupción del embarazo y acusó a la pretendida ley que sólo criminalizaría a la mujer. También la tacharía, la señalaría y la denigraba.

Carlos García Villanueva, dirigente local del Frente Nacional por la Familia, quien se hizo presente en la sede del Congreso del Estado, se desvinculó de cualquier supuesta instrucción del Obispo José María de la Torre.

“Dicen que estamos invadiendo el Estado laico, lo cual es absolutamente falso también, porque un Estado laico es cuando ninguna religión gobierna y aquí ninguna religión gobierna,  ah pero todos tenemos derecho a dar nuestra opinión y nuestro punto de vista a favor y en contra de lo que se esté diciendo”.

Acusó que hubo líderes de partidos políticos que movilizaron sobre todo a grupos feministas. “Sí veo movimientos políticos que buscan pues de alguna manera su proyección hacia las siguientes elecciones. Nosotros no tenemos nadie que esté en algún partido ni que queramos algún  puesto político. Queremos que se blinde la vida y la familia que se defienda”.

Al final y para no ser víctimas del linchamiento por hacer pública su decisión a favor o en contra de la pretendida legislación, diputados optaron por una votación por cédula, es decir, en la absoluta discreción consiguiendo 17 votos a favor, 5 en contra y 5 abstenciones. Al no ser respaldada por 18 votos, el dictamen se archivó como asunto concluido.

Sobre el resultado hubo algunas organizaciones civiles que celebraron y se adjudicaron como propio lo que llamaron un triunfo.  Les resultó más conveniente que se prolongue el debate a que de una vez se decidiera un tema controvertido en una sociedad predominantemente conservadora como es la de Aguascalientes.