En cruceros, jardines, pero sobre todo en el centro de la Ciudad de Aguascalientes, se ha multiplicado la presencia de personas pidiendo limosna, una actividad que de antemano es más atractiva en esta época navideña, en la que florece el espíritu dadivoso.

El sacerdote Carlos Alberto García Zavala, quien dirige a Cáritas, mencionó que se tienen detectadas a muchas personas que viven y duermen en la calle, a las que se les ha ofrecido albergue, baño y alimentos, lo cual rechazan porque han conseguido en la caridad una forma de vida.

Dice que si bien hay que ser misericordiosos, también debería existir la voluntad de superación entre aquellos que viven de la mendicidad.

“Son pobres pero no es una pobreza que nazca de su estado de vida porque son personas que hasta pueden hacer un oficio. Son personas que pueden salir adelante, hacer cualquier cosa, veladores, qué sé yo. Pero no, prefieren vivir de la dádiva, prefieren vivir de la limosna, del pueblo. Entonces yo creo que se puede pensar de una especie de pobreza humana, digamos así, pobreza personal de no tener ganas de salir adelante, no tener ganas de salir de esa situación ¿por qué? porque vieron que en el pedir estaba la forma de vivir”.

Quien también es conocido como el padre Gandhi, expresó que siempre hay gente bondadosa que da sin saber en qué lo va a invertir quien lo recibe. “Yo veo por ejemplo, cómo traen para sus cigarros, traen para sus vicios, o sea alcohol, son estilos de vida. Son estilos de pobreza humana, digamos así, de que lo que les gente les da lo invierten en otros vicios y no en salir adelante”.

También cree que hay quienes podrían pagar hasta un cuarto para poder irse a dormir a ese lugar y sin embargo, no quieren y prefieren vivir en situación de calle.