Aguascalientes

SIGAN HABLANDO DE MI, AUNQUE NO LLEGUEN A DAR LA CARA, SEÑALA OROZCO

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Ahora que está de moda la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, la que congela las cuentas ante cualquier indicio de manejo indebido de recursos, en Aguascalientes no estaría mal replicar una oficina similar con el mismo tipo de funciones, señaló el gobernador Martín Orozco Sandoval, durante el evento por el Día Internacional contra la Corrupción.

Y es que dijo que surge cada “riquito” de la noche a la mañana que si se le busca, siempre tiene relación con algún político. Dijo que ese tipo de prácticas es lo que tiene al país con decepción.

Orozco también dio la bienvenida a cualquier observación que se le haga sobre el manejo de los recursos públicos, y fue sugestivo en sus señalamientos aunque sin pronunciar nombres de destinatarios.

“Tengo tres años que hablan mucho de mí. Sigan hablando, para mejorar. Pueden seguir hablando pero hablemos de todos; de quien se oculta en un discurso y en una imagen, y también de quien da la cara porque está más expuesto. Yo soy de los que da la cara”.

Luego mencionó que el gobierno respeta libertades y autonomías a las instituciones.  Que no tiene por qué meterse en el sistema judicial, ni en  las cámaras empresariales o colegios de profesionistas.

También lamentó que aun y con los avances que se han dado en materia de transparencia y la creación de múltiples oficinas que la soportan y la sancionan, la corrupción sigue estando presente en el país.

María Teresa Belmont Acero, titular del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción, coincidió en que se debe de admitir que aún prevalece una multiplicidad de factores que propician los actos deshonestos.

Señaló que hay un marco institucional débil, impunidad, lentitud en la impartición de justicia, licitaciones y concesiones pactadas, tráfico de influencias, soborno, peculado, uso privado de bienes públicos entre otros.

Unos por omisión otros por complicidad activa pero todos contribuimos a la corrupción, sin ser una práctica propia del estado o de los funcionarios. Nacen a través de prácticas indebidas pero toleradas desde la propia familia, concluyó.

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