SE CASARON A SUS MÁS DE 70 AÑOS

Gregorio Amador Méndez y Guadalupe Flores Villerías tienen más de 70 años de edad y decidieron formalizar su relación casándose en la Casa del Abuelo.

Ambos son de origen campesino y durante 40 años convivían en una relación que no se había concretado  por el hecho de que él fue casado, se separó de su primer esposa a los dos meses, hizo cada uno su vida independiente pero no firmaron el divorcio hasta ahora, que unió formalmente su vida a la de Guadalupe.

Recuerdan cómo fue un perro el que hizo que se conocieran y  tal vez hasta se quisieran. Él buscaba trabajo de pintura o reparación de casas en Jardines de la Asunción cuando en su cruce con su actual esposa, una mascota salió a su paso con ladridos que sólo a ella la asustaron mientras que el reía por la expresión.

Entre el sobresalto y las disculpas,  se dio una amistad que luego se convirtió en noviazgo.

Con bastante optimismo Gregorio ve la nueva etapa en su vida, en la que dice, es cuando se valora más a las personas que han estado presentes en su trayectoria.

Ambos tienen dos hijas, 8 nietos y dos bisnietos. “Para mi será muy lindo lo que Dios me dé de vida, viviendo con ella y viviendo feliz”, expresó.

Recuperado incluso de un problema cerebro vascular, hoy sólo dice: “quiero darle todo lo mejor, ya que Dios me dio esta nueva oportunidad de vivir, quiero aprovecharlo con ella”.

Mientras que Guadalupe Flores expresa que siempre creyó y seguirá creyendo en el amor. Y aunque dice que habrá quien se burle porque decidió casarse a esta edad, lo más importante es que formaliza ese vínculo que ha durado 40 años, un logro que actualmente no todas las parejas cumplen.  “Bendito Dios que me da fuerzas y mantenernos así hasta cuando él quiera”, dijo con emoción.

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