Se prepararon para amortiguar cualquier abucheo y apagar las expresiones negativas que pudieran surgir durante el único evento que sostuvo en Aguascalientes el presidente Andrés Manuel López Obrador, para la entrega de apoyos sociales en el municipio de Jesús María.

La convocatoria que se fomentó a través de un medio de comunicación para gritar consigas al gobernador Martín Orozco en este encuentro, pudo equilibrarse entre los vítores y aplausos a su favor.

En ese bullicio, Orozco refirió que en los momentos difíciles del país y en las decisiones complicadas que asume el Presidente de México, el gobierno de Aguascalientes hará equipo con López Obrador.

Particularmente ante las elecciones en los Estados Unidos, donde pretende reelegirse Donald Trump, se necesita estar más unidos, trabajar juntos, defender al país y apoyar al Presidente en las decisiones complejas que debe tomar, agregó.

“Estando no atrás, sino a un lado de lo que viene, de cómo este México tiene que seguir siendo fuerte. Este México tiene que seguir también tendiendo la mano a quien menos tiene”.

Dijo además que el estado requiere continuar siendo competitivo. El gobernador le pidió a López Obrador que no se olvide de Aguascalientes, como tampoco  Aguascalientes se va a olvidar del Presidente.

No nos vamos a pelear con el gobernador, aludió López Obrador al recordar que ya pasaron los tiempos de campaña.

Ante el coraje y en el corazón caliente la cabeza debe estar fría. Por ello, ofreció visitar municipios de Aguascalientes cada tres meses y atender el interés del gobierno estatal por diversificar la economía local.

Reconoció que la pretendida medida de los aranceles por el gobierno del Estados Unidos, afectaría de manera importante a Aguascalientes.

“El 80 por ciento de los vehículos que se producen en Aguascalientes se venden en Estados Unidos, y con este impuesto se iba a afectar esta industria que genera muchos empleos aquí en Aguascalientes”.

Advirtió que ya no hay riesgo, aunque precisó que “cuando menos durante un tiempo no vamos a tener esa amenaza”.

Explicó que el asunto migratorio fue excusa del gobierno norteamericano pero ahora se atiende más el tema sin que se violen los derechos humanos.

“Hasta en la biblia se dice que hay que tratar bien al forastero. Nada de tratar mal al migrante”.

Y resaltó que de México salió la idea por la que hoy los Estados Unidos decidió apoyar más a los países centroamericanos.