Aguascalientes
POR CUESTIONES ELECTORALES EL GOBERNADOR NO QUIERE A UBER
La entrada de UBER a Aguascalientes es advertido como un descalabro electoral más para el Gobernador Carlos Lozano de la Torre, quien durante los casi seis años de su gestión no pudo llevar a la victoria a su partido, el Revolucionario Institucional.
De ahí varios acusan su rechazo a que opere libremente en esta entidad, más aún porque el alcance es prácticamente en todo el municipio de la Capital, donde cuenta con el único candidato que le dieron chanza de imponer.
UBER sabe muy bien a quien se enfrente y ha sabido vencer a enemigos más grandes. Lozano de la Torre estaría buscando medidas extremas como una forma de llegar a una “tregua” hasta que pasen las elecciones, confiando en el voto duro del taxista. Luego heredaría el problema a quien le suceda.
Lo contradictorio es que, mientras se desgarra las vestiduras por la legalidad de UBER, no mira el problema que construyó con el cuestionado negocio de los taxis ecológicos que, para empezar, circulan con placas de autos particulares y no de transporte público.
¿O será que quiere proteger el negocio de los taxis eléctricos del que se dice, su hijo es el real propietario?