Aguascalientes
MEJORA LA SEGURIDAD, PERO EL 74 POR CIENTO DE LOS AGUASCALENTENSES CONSIDERA QUE EL GOBIERNO NO ES EFECTIVO EN LA ATENCIÓN A SUS PROBLEMÁTICAS
El 44 por ciento de los aguascalentenses percibe que vivir en esta ciudad es inseguro. Ese es el indicador más bajo de los últimos cinco años de acuerdo a los datos del INEGI y que detalló el coordinador estatal, Nicolás Molina.
“Este porcentaje de percepción de inseguridad disminuyó respecto a lo de hace tres meses, que era de 50.7 pero también si lo analizamos respecto a los resultados de hace un año, de septiembre de 2020, que fue del 51.4”.
Lo que más temen las personas mayores de 18 años es hacer operaciones en cajeros automáticos que se ubiquen en la vía pública, y también acudir a sucursales bancarias. Y su tercera preocupación es lo que les pueda pasar cuando usan el transporte público.
Para el 25 por ciento de los ciudadanos la delincuencia seguirá igual de mal en los próximos 12 meses, mientras que el 27 por ciento consideró que empeorará. El restante 46 por ciento se muestra optimista que mejorará o seguirá igual de bien.
Por encima de los asaltos en la vía pública, lo que más impacta en una mala percepción es observar el consumo de alcohol en las calles y el vandalismo, como es el grafitis y los daños a la infraestructura urbana.
Contrasta una mejor evaluación al desempeño de las policías Estatal y Municipal, aunque la mayoría de la gente duplica su confianza en la Marina, el Ejército y la Guardia Nacional.
Los baches se mantienen como la principal problemática que demandan de atención, seguido de las fugas de agua y el taponeo de coladeras por basura. Sin embargo, en la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del INEGI se identificó que el 42 por ciento reclama por hospitales saturados o con servicio deficiente en tiempos de pandemia.
En general reprueban a las autoridades gubernamentales en la atención oportuna y eficiente a sus necesidades, pues el 74 por ciento de los aguascalentenses considera al Gobierno que no es efectivo. Este indicador supera incluso a la mala consideración de los mexicanos en sus autoridades, que es del 70 por ciento.