Aunque el sector oficial no reconoce que hay una crisis económica, lo cierto es que son más las  personas que  recurren al financiamiento tanto de instituciones crediticias como agiotistas para solventar las apremiantes necesidades en el hogar.

Ese escenario lo aprovechan abogados con falta de ética que utilizan la intimidación y no dan tregua para aplicar el embargo como medida de presión para recuperar las deudas, refirió Eloy Morales Brand, jefe del departamento de Derecho de la Universidad Autónoma de Aguascalientes.

“Cuando los buscan con intimidaciones, amenazas, haciéndoles creer que va la policía o que los pueden detener o que puede iniciarse un procedimiento penal que es otro tema, ahí es donde sí pueden denunciar incluso a las personas que los están intimidando, porque puede convertirse en una extorsión. O sea, no es una práctica jurídica adecuada el tratar de intimidar o amenazar a una persona para obtener ese recurso económico o esa deuda económica”.

Precisó que tener una deuda de carácter civil o mercantil no es un asunto penal. Nunca va a llegar a cuestión de cárcel. Hay que entender sólo que es el patrimonio de otras personas que hay que respetar.

Acusó la prevalencia de un sistema que aún tolera la falta de ética entre algunos abogados. “Es una realidad en Aguascalientes y en la mayoría de los estados que hay muchas seudoabogadas y seudoabogados que utilizan estas prácticas con falta de ética para tratar de afectar a las personas y recuperar algunos ingresos, o tratar de engañarles. Esa parte también que lo entiendan, que nunca le suelten dinero directamente a un abogado”.

Por ello, considera imprescindible la reforma al Artículo V de la Constitución General para que los integrantes que  estén colegiados todos los profesionistas y se tenga una plena identificación.

Eloy Morales también cuestionó la operación de universidades en el país que dan la carrera de derecho pero que más bien regalan el título. No hay un filtro real para quien sale como abogada y abogado de esas universidades.