EL PRI: ENTRE BANDAS Y BANDOLEROS

Trabajadores de base del Gobierno del Estado se han animado hasta hoy a denunciar cómo fueron obligados durante la gestión del ex gobernador Carlos Lozano de la Torre, a trabajar a favor de quienes fueron los  candidatos que él le impuso al PRI, pero que la justicia divina le pagó con la  mala suerte de que ninguno ganara.

“Nos hacían ir a los cruceros para agitar las banderas en  la campaña de Miguel Romo Medina y Paco Chávez. Los jefes estaban ahí al pendiente de vernos”, dijo un trabajador del Instituto de Vivienda Social y Ordenamiento de la Propiedad.

Similar historia cuenta una empleada del DIF Estatal, que refiere cómo desde Palacio de Gobierno la mandaron a ponerse a las órdenes de Francisco Chávez, en su aspiración a la alcaldía de la Capital.  Le dijeron que mantendría su sueldo aún y cuando estuviera dedicada de tiempo completo a las labores proselitistas.

“Imagina, no tenía de otra…. O mi chamba o la campaña. Pero todo se paga. Mira cómo le fue al PRI. Ya cuando fue la campaña de Lorena (Martínez) a la de ella no nos mandaron sólo a la del doctor Ríos (Jesús Ríos Alba, quien fuera candidato a la Presidencia Municipal de Aguascalientes por el PRI)”, explicó.

La consigna que recibieron algunos fue afiliarse al PRI, sumarse a la campaña de los candidatos de Lozano o bien, dejar de seguir colaborando en el gobierno, independientemente su antigüedad en el puesto.

Una vez concluido el pasado gobierno y sin la amenaza de la afiliación, muchos decidieron presentar su renuncia al Revolucionario Institucional, según señalan.

En el Comité Ejecutivo Nacional del PRI, no precisaron cuántas fueron las personas que renunciaron a la militancia sin el yugo de la administración de Carlos Lozano, supuestamente porque aún están validando el dato ante el Instituto Nacional Electoral.

Lo que sí logró informar es que en este momento su padrón es de 90 mil 45 ciudadanos.

También reveló que en el sexenio pasado estatal se recaudaron por cuotas de militantes 3 millones 892 mil 687 pesos.

En el 2011 no se reportaron ingresos, aunque el 2012 fue eufórico con un millón 69 mil pesos. Sin embargo, en el año en que perdió el PRI el poder en el gobierno captó casi 727 mil pesos y este año hasta el mes de octubre,  apenas llega a los 103 mil pesos.