CONSTANTES FILTRACIONES VUELVEN INESTABLE A PASO A DESNIVEL

Es imprescindible la atención a las filtraciones que por siempre ha registrado el paso a desnivel de la Alameda y la avenida Manuel Gómez Morín.

Se ubica en una zona de recarga del manto acuífero y actualmente brota abundante agua, por las lluvias registradas tan sólo en  un solo día del presente mes de diciembre.

José Luis García Ruvalcaba, decano del centro de las Artes y la Cultura de la Universidad Autónoma de Aguascalientes y quien  participó en ese proyecto así como en la regeneración de los talleres del ferrocarril, dijo que se necesita hacer un estudio por la intensa actividad de las filtraciones y determinar el grado de afectación que ya muestran las estructuras.

“Lo que les está afectando es la humedad, porque a final de cuentas pues tienes un concreto que siempre está húmedo y adentro del concreto tienes varillas. Si las varillas se empiezan a oxidar, empiezan a tronarse las columnas”, advirtió.

También debe considerarse el peso y la vibración por el paso de trenes, lo que provocaría acomodo constante del terreno.

Estima que se requiere un dren como elemento correctivo y que se ubique después de las columnas para canalizar el agua que brota.

García Ruvalcaba reconoce que esa obra debió haberse hecho de origen, sin embargo la Secretaría de Comunicaciones y Transportes que tuvo a cargo en su momento el financiamiento y los trabajos, modificó los planes que se propusieron como era el de contar en la parte superior con una plaza que conectara directamente con la Plaza Tres Centurias y que al inferior las banquetas no fueran tan amplias.

“Aparte se hizo más alto de lo que estaba previsto, porque originalmente era un poco más angosto para poder hacer una comunicación más directa por la parte de arriba. Pero bueno, ahí entraron muchos factores… y bueno, si tú ves también el lado norte tiene una banquetota que no tenía caso”.

Insistió en contar con un canal que desfogue el agua de las filtraciones.  A la larga eso va estar afectando, porque permanentemente se tendrá  una estructura húmeda: de los cimientos, de las columnas y del suelo, lo que en conjunto se vuelve inestable.