CASADOS DEBERÍAN SENTIRSE MUY FELICES

Desde la Iglesia Católica se dirigieron oraciones este domingo para la protección y el sano desarrollo de la niñez. El obispo Juan Espinoza destacó con ello el papel de los matrimonios, por ser una vocación. “No se juntaron por aras del azar, sino que Dios los llamó a este señor y a esta señora, tienen una vocación muy bonita, por eso no nos gusta que se destruya porque destruimos el proyecto de Dios y para ser una opción tenemos que pensarlo muy bien, tenemos que hacer una prueba, por eso el noviazgo es muy importante”.

Es por ello, que pidió a los padres de familia conducir bien a sus hijos y cumplir la misión que cada uno tiene en la vida como parte de la felicidad.

Puntualizó que los casados deberían sentirse muy felices y contentos de tener a su esposa o esposo y que con ese ejemplo los hijos digan: vale la pena casarse.

Además, sostuvo que es necesario que cada uno abra las puertas del corazón a todos. “A veces nos encerramos en la comodidad, en lo fácil, en la indiferencia de los demás. Nos cerramos a las personas que nos necesitan… nos cerramos al cariño de las personas que nos aman. Nos cerramos a las personas pobrecitas, humildes, que no queremos verlos”.