APLICAN LA GUILLOTINA EN EL PRI

Antonio Lugo Morales “decidió” dejar la dirigencia del PRI en Aguascalientes, en medio del escándalo en el que se vio envuelto por presuntamente haber ejercido violencia de género contra compañeras de su partido.

En su relevo, Alejandro Moreno, dirigente nacional del Revolucionario Institucional, designó como delegado en funciones de presidente al zacatecano Carlos Peña Badillo.

Él dijo que se viene de un proceso donde la gran lección para el PRI en Aguascalientes es que tiene que estar cohesionado. Mencionó que hay que esperar las condiciones que se pondrán para elegir al nuevo presidente local, aunque hay fundamentos que ya son inalterables.

“Primero es la apuesta por la unidad; segundo, que en Aguascalientes la dirigencia sea de Aguascalientes y, tercero, que a partir de ahí hagamos los planteamientos necesarios para que el PRI de Aguascalientes regrese a ser ese partido sólido, pero además acompañado de mujeres y hombres valiosos”.

El delegado del Comité Ejecutivo Nacional, Humberto Lepe señaló que en la salida de Lugo existieron quizá muchas razones de peso, sin atreverse a referir alguna.