Aguascalientes
ACUMULA PACO CHÁVEZ MÁS DENUNCIAS. LO CITAN A COMPARECER Y CORRE
El ex director general del Instituto de Educación, Francisco Chávez Rangel, fue requerido para comparecer en el Juzgado Primero de lo Civil, pero no se trató de rendir cuentas sobre los desfalcos que se le atribuyen a lo largo de su gestión, aunque sí por la relación directa sobre la supuesta compra que se hizo de computadoras para escuelas a la Universidad del Carmen de Campeche por cerca de 400 millones de pesos y que nunca se entregaron.
Desde alrededor de las 9 de la mañana y por poco más de dos horas, estuvo en la sede del Poder Judicial. Precisamente desató cualquier tipo de especulaciones. Si fuera de los malos manejos de los recursos estaría en una instancia penal.
Según logró conocerse, este proceso se deriva de la demanda interpuesta por el abogado Martín Paulo Guerra Scott, a quien no le cumplió debidamente con pagos de sus servicios profesionales. Él fue contratado por el Instituto de Educación de manera directa para demandar a la Universidad del Carmen.
El acuerdo fue liquidar 2 millones de pesos el 3 de junio del año 2016 con la firma del contrato. Luego se le darían 2.5 millones de pesos cuando se lograra ganar el juicio a favor del gobierno de Aguascalientes, y finalmente 1.5 millones de pesos, una vez que se radicara el asunto en la PGR y se consignara ante el juez de distrito correspondiente.
Adicionalmente se pactó una iguala de 60 mil pesos mensuales hasta por 12 meses, para los gastos que se generaran por los trámites de los órdenes penal, civil y extrajudicial.
Se supo que en su exposición, Francisco Chávez Rangel cayó en contradicciones e inconsistencias. Por ejemplo, primero dijo que contrató sin licitación alguna al despacho de Guerra Scott por indicaciones de sus superiores.
Por el comportamiento que había en ese entonces, sus superiores sólo eran el ex gobernador Carlos Lozano de la Torre, su esposa Blanca Rivera Río de Lozano e incluso José Carlos Lozano Rivera Río, debido a que de todos ellos atendía indicaciones.
Luego se retractó y dijo que fue por su cuenta. Además se dijo que Martín Paulo Guerra Scott fue uno de sus compañeros cuando estudió la licenciatura en derecho en Nuevo León, evidenciando un posible caso de tráfico de influencias.
El tema de la irregular compra de computadoras y todos sus enramados de corrupción, se encuentra con un trato penal en la Fiscalía Anticorrupción y administrativo en el órgano interno de control del Instituto de Educación.
Al ex titular del IEA, uno de los funcionarios consentidos de Carlos Lozano de la Torre, se le evitó salir por la puerta principal del Juzgado, debido a la presencia de algunos medios de comunicación, y se le facilitó la “fuga” por un túnel que conecta las oficinas directamente con el estacionamiento y que es de uso exclusivo de personal autorizado por el Supremo Tribunal de Justicia.