ABUSARON DEL SALARIO Y DE LOS CARGOS

Ni la austeridad ni la eficiencia distinguieron a la gestión de Carlos Lozano de la Torre. Sus funcionarios más cercanos se daban gustos fuera de lo común: comidas gourmet en restaurantes de lujo, los viajes en primera clase con hospedaje en hoteles de gran turismo y no podían faltar los finos vinos en cualquier reunión y banquete, todo con cargo al gobierno.

Pero lo que resultó más caro al presupuesto fue la pesada nómina, en la que quedaron integrados familiares, amigos e incluso reporteros y quienes figuraron como compromisos políticos con salarios considerados como ofensivos.

Fue en la nómina y no la obra pública ni los programas sociales, a la que se destinó el principal gasto del sexenio.

El Oficial Mayor, Juan Francisco Larios Esparza, asegura que ya se trabaja en dejar desde el próximo año en la  ley, un menor costo por cuestión de salarios y también reducir los puestos directivos.  Señala que con las medidas que por ahora son adoptadas, ya se ha ahorrado un 10 por ciento en sueldos.

“A  final de cuentas la parte de reducción importante que se avecina en comparación con la administración pasada, es la parte de reducción al capítulo 1000 que  se refiere a toda la parte de sueldos. Vamos nosotros programando una reducción en mandos directivos, fortaleciendo las áreas operativas que eso nos va dar pie a que se eficientice la atención a los ciudadanos, que es el fin”.

La reingeniería en una nueva estructura orgánica que se estará proponiendo para la aprobación del Congreso del Estado, refiere además que permanezca la Jefatura de Gabinete que en la gestión de Carlos Lozano funcionó como un cargo de Vicegobernador para su titular, pero ahora sólo a nivel de Coordinación.

Se estarían eliminando los mandos en algunos fideicomisos y otras áreas que sólo han generado burocracia sin sentido.

Sobre gastos como los que se hacían en café, galletas y otros que parecen innecesarios, dijo que únicamente se tendrán que disminuir.

“A final de cuentas tiene que haber una reducción en todos los rubros del gasto. La política de austeridad radica en eso, en ser más eficientes en el gasto, no necesariamente desaparecer rubros. Porque a final de cuentas estamos nosotros sujetos a una normatividad aplicable, en donde nos especifica ya de por sí, cuáles son los rubros en los que tiene que ejercerse el gasto”, concluyó.